
La Unión Europea está dispuesta a apoyar la descolonización de Gibraltar, según el mandato de la resolución de la Asamblea General de la ONU de 1965, toda vez que el Reino Unido dejará de ser socio comunitario y sólo España, que siempre ha mantenido su reclamación, será estado miembro y gozará del amparo de Bruselas.
Según una información publicada por el diario británico The Telegraph y que Noticias Gibraltar ha podido confirmar en fuentes conocedoras del asunto, el documento que detalla los territorios dependientes del Reino Unido en los que los ciudadanos comunitarios no necesitarían visado, en caso de un Brexit sin acuerdo, deja expresa y por escrito la excepción de Gibraltar.
En ese documento se escribe, a pie de página, que “hay una disputa entre el Gobierno de España y el Gobierno del Reino Unido sobre la soberanía de Gibraltar” y que “el territorio se ha registrado en la lista de territorios no autónomos de las Naciones Unidas, sujeto a descolonización.”
Esta nota a pie de página ha alertado a las autoridades británicas sobre un endurecimiento de la posición de la Unión Europea respecto a Gibraltar, toda vez que ya el Reino Unido no participa en las decisiones políticas de futuro. El diario británico The Telegraph, con esta filtración, apoya la tesis del miedo a un ‘no acuerdo’ de salida, según insiste la primera ministro británica Theresa May.
Lo cierto es que, en efecto, la excepción de Gibraltar y su sujeción a un proceso de descolonización de acuerdo con la resolución de Naciones Unidas de 1965 está quedando por escrito en la documentación que Bruselas prepara para el caso de que no haya acuerdo de retirada con el Reino Unido.
Como también es cierto que hasta ahora la Unión Europea mantenía una posición neutral de una disputa entre dos de sus países miembros, pero que, a partir del 29 de marzo, haya o no acuerdo del Brexit, la situación será distinta, porque sólo quedará uno de los dos países dentro de la Unión Europa: España.
Y en ese caso, con acuerdo o sin acuerdo de retirada, es normal y coherente que Bruselas asuma la defensa de la posición española respecto al contencioso de Gibraltar ya que será el único socio que permanezca en la institución comunitaria, además de que se trata de una posición refrendada por Naciones Unidas desde hace 54 años y que no ha cambiado nunca a lo largo de todo este tiempo.