
La Guardia Civil ha desmantelado una organización dedicada a facilitar armas de fuego a los narcotraficantes que actúan en el Campo de Gibraltar en una operación en la que han sido detenidas diez personas y otras dos investigadas en las provincias de Sevilla, Cádiz, Córdoba, Madrid y Valencia.
En la denominada Operación Navero-Sherry han sido intervenidas además veinte armas de fuego y 12.400 cartuchos, doce metros de mecha lenta explosiva, dos granadas fumígenas y pólvora, así como equipos de visión nocturna e importantes cantidades de estupefacientes. Según las investigaciones los miembros de la organización viajaban en coche hasta otros países para importar las armas a España ocultas en dobles fondos.
Las investigaciones que han permitido desmantelar esta red se iniciaron a raíz de que la Guardia Civil interviniera dos escopetas tácticas a una de las organizaciones de narcotráfico que operaba en el Campo de Gibraltar, en una operación en la que fueron intervenidos 2.000 kilos de hachís.
Agentes de la Jefatura de Información de la Guardia Civil abrieron una investigación para averiguar el origen de estas armas y, en colaboración con la agencia federal estadounidense ATF (que investiga asuntos relacionados con alcohol, tabaco, armas de fuego y explosivos), comprobaron que las armas habían sido introducidas de contrabando en España.
Los investigadores fueron identificando a los miembros de la red y localizando dos talleres clandestinos en los que operaban. La red distribuía las armas hacia el Campo de Gibraltar desde El Puerto de Santa María, donde vivía otro de los detenidos.
A los detenidos e investigados se les considera autores de los delitos de tráfico de armas, contrabando, depósito de armas de guerra, tenencia ilícita de armas, tráfico y depósito de municiones, robo con fuerza, receptación y tráfico de drogas.