Miércoles, 31 de Mayo de 2023
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Gibexit: reina la calma entre el público en Gibraltar

  • Imagen de Robert Vasquez
    Por Robert Vasquez
    Abogado y periodista gibraltareño
    Calle comercial de Gibraltar. Foto Sergio Rodríguez
    Foro
    *Silencio del público sobre las negociaciones del Gibexit

    *Prevalece la opinión de España en cualquier resultado

    *El silencio de Gibraltar manda a paseo las reacciones del pasado

    *El silencio indica el deseo de un tratado del Gibexit neutral respecto a la soberanía

    *Visita real inútilmente sugerida

    *La reacción pública ante un Gibexit frustrado por consideraciones de defensa, puede resultar interesante

    *Será necesaria la ayuda del Reino Unido si fracasa el Gibexit

    *La ayuda del Reino Unido con la garantía de £ 500 millones es esencial, pero ¿en qué condiciones?

    *La ayuda incondicional del Reino Unido es muy improbable

    *Se espera que pronto haya progresos en el frente del Gibexit

    *Es probable que se produzcan avances a medida que pase el tiempo

     

    CURIOSA FALTA DE REACCIÓN EN GIBRALTAR

    Un intrigante silencio público domina las actuales negociaciones del tratado del Gibexit entre el Reino Unido y la UE sobre Gibraltar. En el pasado, la UE ha confirmado que no acordará el Gibexit en contra de los deseos de España.

    Se trata de una reacción curiosa e interesante cuando históricamente cualquier intervención española sobre el estatus internacional de Gibraltar ha provocado una respuesta estridente (por no decir violenta) en Gibraltar.

    La reacción pública hasta ahora indica una aceptación general de que es necesario un tratado del Gibexit. Es una aceptación que se basa directamente en la promesa de que no habrá concesiones en lo que la mayoría de la gente entiende como soberanía, jurisdicción y control británicos. Se trata de una frase muy manida, con pocos intentos de definición, más allá de lo sugerido en este blog en el pasado.

    Es probable que pronto se produzcan avances en el Gibexit, a pesar de las filtraciones negativas en España.





    VISITA REAL

    La ausencia de cualquier objeción pública se ve magnificada por la reacción de silencio que ha habido sobre las sugerencias en la GBC, coincidentes tanto por parte del Gobernador como por el Comandante de las Fuerzas Británicas, de que Su Majestad el Rey Carlos III visite Gibraltar.

    La última visita Real en 1954 provocó que España iniciara su campaña de restricciones contra Gibraltar. Las sugerencias de una visita Real en este momento no son muy diplomáticas, pero pueden servir a un propósito diferente, útil para los intereses de defensa del Reino Unido.

    CONSIDERACIONES MILITARES

    Lo interesante podría ser la reacción pública que se produjera en el caso de que cualquier posible acuerdo sobre el Gibexit se viera frustrado por consideraciones e intereses militares británicos, y por tanto se vieran afectados el comercio y las comunicaciones transfronterizas. Es poco probable que España no dé a conocer públicamente el motivo de tal eventualidad.

    Existe el peligro de que las negociaciones del Gibexit avancen favorablemente hacia un tratado y que ese avance no vaya acompañado de un acercamiento entre el Reino Unido y España sobre cualquier aspecto o consideración militar. Es de dominio público que hay conversaciones en curso entre el Reino Unido y España sobre esos asuntos relacionados con la defensa.

    EL APOYO CENTRAL DEL REINO UNIDO

    El resultado que menos se necesita es que se acuerde un tratado del Gibexit, pero que su aplicación se vea impedida por cuestiones exclusivamente relacionadas con la base militar del Reino Unido en Gibraltar. Las consecuencias financieras para Gibraltar podrían ser sustanciales.

    Las responsabilidades del Reino Unido hacia Gibraltar, en caso de que no se finalizara el tratado del Gibexit (o se fraguara), seguramente crecerían exponencialmente, tal y como sugirió Sir Bob Neill MP, Presidente del Grupo Parlamentario de Todos los Partidos de Amigos de Gibraltar, en la Cámara de los Comunes en el reciente debate sobre los Territorios de Ultramar.

    AYUDA FINANCIERA

    La necesidad de ayuda financiera por parte del Reino Unido aumentaría exponencialmente y superaría la ayuda prestada por el Reino Unido al garantizar un préstamo a Gibraltar de 500 millones de libras. Se trata de una garantía que se agota en la primera semana de diciembre. Por el momento, no hay información pública sobre si esa garantía se ha prorrogado o se prorrogará.

    Sir Bob Neill, en ese mismo discurso en la Cámara de los Comunes, pidió una prórroga de 25 años para la garantía. El Reino Unido debe ser perfectamente consciente de que Gibraltar no puede pagar ahora. La cuestión es qué se está negociando con Gibraltar a cambio de la necesaria renovación de la garantía u otra refinanciación.

    ¿AYUDA INCONDICIONAL DEL REINO UNIDO?

    Parece poco probable que la ayuda financiera del Reino Unido, incluidos los 500 millones de libras, llegue a Gibraltar sin condiciones. Esas condiciones podrían abarcar una miríada de consideraciones. Es imposible conjeturar cuáles podrían ser, pero es probable que incluyan una mejor gestión de nuestras finanzas y gastos públicos, y una revisión del sistema fiscal.

    Al fin y al cabo, hay zonas del Reino Unido deprimidas financieramente que reciben una ayuda limitada. Gibraltar, «parte integrante del reino indiviso», difícilmente puede considerarse un caso excepcional que deba preferirse a otras partes de ese reino.

    PROGRESO

    Es de esperar que en las próximas semanas/meses se produzcan avances optimistas en todos los frentes, ya sea en forma de tratado o de chapuza. Es poco probable que se deje fracasar la necesidad de un tratado del Gibexit, necesidad que han admitido los primeros ministros británico y español.

    Es probable que se encuentre una salida. Siempre ocurre que cuando los calendarios se agotan y las puertas comienzan a cerrarse, los negociadores endurecen sus posiciones para ganar el último milímetro, pero no permiten abandonar la mesa de negociaciones sin un «acuerdo». Las próximas semanas o meses deberían resultar interesantes en el frente del Gibexit.