Jueves, 28 de Septiembre de 2023
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Tiene que haber límites

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    Por Patricio González
    Político y escritor. Alcalde de Algeciras tres legislaturas. Ingeniero técnico naval
    Patricio González
    Foro
    El imparable desarrollo tecnológico ha instaurado lo que se llama la hiperconectividad, sobre todo desde que los móviles se han convertido en aparatos inteligentes, auténticos ordenadores portátiles de pequeñas dimensiones.

    Esto provoca que desconectar en los días libres y en las vacaciones sea una tarea titánica. Imposible, incluso, en algunas profesiones. Y eso hay que asumirlo, pero eso no significa que se hayan fulminado para siempre todos los límites que establecían tradicionalmente el respeto y el conocimiento. No todo vale.

    Reconozco que ante ciertas actitudes no salgo de mi asombro. Salvo por una cuestión de fuerza mayor, no se me pasa por la cabeza intentar contactar con alguien antes de las ocho o nueve de la mañana.





    Por las noches, a partir de las 22.00 horas, otro tanto. Menos aún un fin de semana. Pero mi asombro se dispara cuando al levantarme me encuentro con bastante asiduidad con WhatsApp que algunos/as me han enviado a las seis o siete de la mañana, sábados y domingos incluidos, para cuestiones peregrinas(hasta para venderte participaciones de lotería de Navidad).

    Me salva de estas intromisiones descabelladas la costumbre de dormir siempre con el móvil apagado o en modo avión. El tema de los “Asaltos” digitales nocturnos recibo menos, pero el último disparatado que recuerdo fue a cargo de alguien al que no tengo identificado en el móvil que me alertaba, bastante pasadas las 22.00 horas de aquel día entre semana, de la inauguración de un nuevo restaurante.

    A estas alturas sigo sin saber quién es y por supuesto que no he ido al local de marras. Otro caso muy extendido, también tremendo, es que te incluyan en grupos de WhatsApp sin pedirte permiso antes. En fin... vamos camino de la extinción.