La colisión con dos muertos se produjo cerca del puerto linense de La Atunara
La colisión entre un patrullero de la Policía de Gibraltar y una embarcación semirrígida de las conocidas popularmente como narcolanchas, y que ha terminado con un saldo de dos muertos y dos heridos, se podría haber producido muy cerca del puerto linense de La Atunara y fuera de las aguas que Gibraltar reivindica como territoriales británicas, según distintos testimonios.
El Gobierno de Gibraltar no sólo tendrá que afrontar el saldo de los dos muertos y dos heridos de esta persecución a alta velocidad con tan fatal desenlace, sino también la responsabilidad por las maniobras de riesgo que sus policías llevaron a cabo, sin ninguna autorización conocida, fuera de las aguas que reivindican como territoriales del Reino Unido y, por consiguiente, fuera de toda posible jurisdicción, reconocida o no.
Un patrullero de la Policía de Gibraltar (RGP) llevó a cabo a primeras horas del domingo una persecución a alta velocidad sobre un buque semirrígido de 14 metros de eslora, con cuatro ocupantes y cuatro motores fueraborda de 300 caballos de potencia, embarcaciones conocidas popularmente como narcolanchas.
Por los testimonios que ha podido recoger este medio en diversas fuentes, la colisión entre el patrullero y la narcolancha se produjo en aguas del término municipal de La Línea, en concreto por la zona de La Atunara, y muy alejados de las aguas que rodean el Peñón de Gibraltar.
Tras el choque, la patrullera gibraltareña se llevó consigo al Peñón tanto la embarcación semirrígida aprehendida, como ambos cadáveres y heridos.
Los dos muertos son ciudadanos marroquíes residentes en Ceuta y uno de los dos heridos también, pero el cuarto ocupante de la lancha y segundo de los heridos es un ciudadano portugués que reside en La Línea.