El gobernador británico de Gibraltar, Edward Davis, ha resaltado en su tradicional mensaje de Navidad la importancia del diálogo humano y entre las comunidades y ha destacado que la comunidad gibraltareña hace suyo este “poder transformador” de las personas y sociedades.
Aunque el gobernador Davis ha utilizado argumentos repetidos de mensajes anteriores, ha dedicado este año gran parte del mismo a la importancia del diálogo, aspecto novedoso y que adquiere cierta relevancia política ante los acontecimientos que sobrevendrán en 2019, con la salida británica de Europa y, por consiguiente, de Gibraltar.
“Si queremos hacer del mundo un lugar mejor –ha dicho el gobernador-- esto sólo puede hacerse a través del diálogo. Para garantizar un futuro mejor, necesitamos un diálogo mundial inclusivo. Un diálogo en el que el foco está en escuchar, no en hablar. Un diálogo en el que no se espera que nadie rinda sus principios o valores; más bien, todo el mundo busca aprovechar el genio decisivo de la construcción de un espacio compartido para las creencias, culturas, fortalezas, ideas de todos, y sí, tal vez sorprendente para algunos, incluso para sus propios intereses”.
En su extensa reflexión sobre el diálogo, el gobernador Davis ha arrancado desde el Libro del Génesis: “Si la miríada de razas del mundo, las religiones, las culturas y las generaciones deben coexistir en paz, libertad y prosperidad, deben ser capaces de comunicarse entre sí, con una mente abierta, para que podamos entender y aprovechar al máximo lo que otros tienen para ofrecer en la búsqueda de soluciones colectivas a los problemas colectivos”.
Y, en este sentido, el máximo representante del Reino Unido considera que “Gibraltar no sólo entiende, sino que además aprovecha al máximo el poder transformador del diálogo humano. Gibraltar tiene la humildad para aceptar la diferencia. Una humildad que está en el corazón de la ventaja definitiva de la Roca: su comunidad inclusiva, respetuosa y generosa”.