
El GSD lamenta la reacción del Gobierno de Gibraltar, que lidera Picardo, a su propuesta de mejora en un tema tan sensible al ciudadano como es la salud pública, con respuestas que evitan el debate e insultan a la oposición, según Trevor Hammond.
El Gobierno de GSLP, con su respuesta al parlamentario del GSD Trevor Hammond sobre las prácticas de abastecimiento de combustible, ha demostrado “una vez más, que su marca de política es simplemente evitar el debate constructivo e insultar a los miembros de la oposición mientras se dan palmaditas en la espalda por un éxito mediocre”. Esa es la reflexión que hacen desde la oposición política del GSD.
Hammond sugirió, con un espíritu constructivo según sus palabras, que debería realizarse una revisión de la industria del abastecimiento de combustible para garantizar que siempre se utilicen las mejores prácticas y con la posibilidad de hacer mejoras y recomendaciones. “Estos problemas afectan al corazón de la salud pública y es una vergüenza que el Gobierno no esté dispuesto a entablar un diálogo constructivo que reconozca que sigue habiendo un problema grave con la calidad del aire en Gibraltar”.
En ese mismo sentido, el parlamentario de la oposición entiende que todos los partidos tienen responsabilidad en cuanto a la salud pública para “contribuir a realizar mejoras, ya sea en el Gobierno, en la oposición, una organización no gubernamental o incluso cualquier ciudadano”.
“El Gobierno y los ministros pueden seguir felicitándose continuamente --apunta el responsable de la oposición en materia medioambiental-- pero cada vez que un experto independiente evalúa la calidad del aire los resultados han caído tristemente por debajo de los estándares aceptables. Ya es hora de que el Gobierno elimine las burlas y los insultos y trabajemos juntos, como una comunidad, para abordar este problema que afecta a la salud pública ahora y afectará a las generaciones venideras”.
"Sobre el tema del abastecimiento de combustible —comenta también Hammond-- he pedido una revisión, no un cese de la industria como sugiere el Gobierno, porque siempre se pueden hacer mejoras y, si se pueden identificar, pueden tener un impacto positivo en la salud pública. Por qué el doctor Cortés sería tan reacio a aceptar eso, no tiene ningún sentido y no le da crédito”.