También aumentan las intervenciones de droga
El delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, ha dado a conocer hoy los datos de incautaciones por contrabando llevados a cabo en Andalucía a lo largo del año pasado, entre los que destacan el incremento de la picadura de tabaco, que ha alcanzado las 285 toneladas y los 5,2 millones de cajetillas de tabaco, mientras que, en lo que va de año, ya se ha interceptado un 20% más de drogas, hasta alcanzar las 225 toneladas.
Sanz ha defendido la “importante y crucial labor que realizan las Agencias Tributarias en la lucha contra el fraude fiscal y los tráficos ilícitos, una tarea que “necesita de la colaboración y coordinación” para mejorar la eficacia de las operaciones y perseguir y erradicar defraudadores y organizaciones de narcotraficantes.
El delegado del Gobierno ha pronunciado estas palabras durante la inauguración de la XII edición del grupo Transfronterizo Hispano-Portugués contra el fraude fiscal, donde ha destacado el interés de este tipo de encuentros para “impulsar la coordinación y analizar cómo están funcionando los intercambios directos de información, ya que, en muchos casos, puede ser la clave del éxito de una operación”.
Aunque el delegado del gobierno en Andalucía no ha entrado en detalles de las zonas donde han sido más numerosas las aprehensiones, se sabe que toda la costa del Campo de Gibraltar es altamente sensible.
De este modo, Sanz ha detallado que las aprehensiones de picadura de tabaco han tenido un notable incremento, alcanzando más de 285 toneladas incautadas el año pasado, el 70% del total nacional, mediante operaciones de gran envergadura como ‘RAMA’, ‘ROSA’ o ‘PICADO II’. En el caso de las cajetillas, la Dependencia Regional de Aduanas e Impuestos Especiales incautó en 2016 más de 5,2 millones.
En cuanto al narcotráfico, el delegado ha puesto en valor el “esfuerzo titánico” de la Agencia Tributaria que, gracias a la colaboración de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, ha permitido que en este ejercicio se hayan incautado en torno a 225 toneladas de sustancias estupefacientes, un 20% más que en el mismo periodo de 2016.
