
La familia de la escocesa Lisa Brown, desaparecida el 4 de noviembre de 2015, ha ofrecido, a través de la ONG Crimestoppers, una recompensa de 100.000 libras para todo aquel que pueda dar información sobre ella. Así lo han hecho saber familiares de Brown, el embajador español en el Reino Unido, Simon Manley y representantes de Crimestoppers que han ofrecido una comparecencia de prensa, en la que también ha estado el subdelegado del Gobierno en Cádiz, Agustín Muñoz, en el hotel Guadacorte.
Brown vivía en la zona de San Roque, más concretamente en el Valle del Guadiaro, junto a su hijo. Trabajaba en el sector de hostelería y tenía una pareja, principal sospechoso que está fugado y sobre el que pesa una orden de búsqueda de índole internacional, con la que vivía hasta el fatídico día. "Creemos que hay gente que sabe algo pero están guardando silencio", apuntó Craig Douglas, hermano de la desaparecida. "Queremos enterrar a nuestro familiar y poder descansar" y es que todos dan por hecho que es prácticamente imposible localizar con vida a Lisa Brown.
Simon Manley y Agustín Muñoz han resaltado la estrecha colaboración que mantienen los cuerpos de seguridad de ambos países. El subdelegado del Gobierno español no ha entrado en muchos detalles de la investigación. "Sigue en marcha y la lleva a cabo la Guardia Civil".
Por su parte, Manley ha agradecido la colaboración española y ha hecho un llamamiento a la colaboración ciudadana. Especialmente de la gente que vive en el entorno en el que residía Brown.
Crimestoppers, una ONG independiente pero que cuenta con financiación del gobierno, garantiza el anonimato de las personas que ofrezcan información fidedigna. Según Roger Crtitchell, uno de sus integrantes, "pueden informar a través de nuestra web, que garantiza el anonimato". La eficacia de la organización en este tipo de casos es muy elevada. No en vano, de 96 fugitivos que están buscando ya han localizado a 80.