Gibraltar busca consolidar su centro financiero después del Brexit gracias a los activos digitales y orienta su legislación para adecuarla a las normativas británica y comunitaria. Los cambios adoptados y la fuerte actividad internacional de los representantes gibraltareños está consiguiendo que el Peñón resulte atractivo para el sector de las criptomonedas.
Gibraltar es un destacado centro financiero desde hace ya muchos años. Su fiscalidad y ubicación estratégica ha aumentado aún más el interés de las grandes compañías por estar ubicada en una de las que, al menos hasta ahora, era puerta de Europa.
Según fuentes del sector, la llegada del "dinero virtual”, como se conoce coloquialmente a los activos digitales, está provocando la dinamización de profesionales privados e instituciones públicas en un trabajo de campo que tiene por objeto "preparar al Peñón para lo que viene, además con el factor Brexit como elemento clave".
Estas fuentes se refieren a los “tokkens” y al “block change”, el dinero encriptado que se apunta como el futuro para las transacciones financieras entre las compañías y las entidades dedicadas al negocio financiero.
El objetivo, según las fuentes consultadas por Noticias Gibraltar, es "estar adaptados a las dos normativas, para que el Brexit no sea un obstáculo". Esto significa que el Peñón pretende tener los máximos controles legales tanto para las operaciones que se mantengan con Londres, más allá de marzo de 2019, como para ser un centro de operaciones financieras también con el resto de Europa.
En esa línea se están moviendo los negocios, muchos de ellos pertenecientes a grandes compañías y ubicados, en su mayoría, en el World Trade Center. Sin duda, una muestra más de los avances que, en distintos sectores, se están produciendo en la colonia de cara a un Brexit cada vez más inmediato.
