El ministro británico encargado del Brexit, David Davis, ha reconocido que el Reino Unido no ha realizado un análisis formal y sectorizado sobre el impacto que puede tener sobre su país la salida de la Unión Europea. "Hasta donde yo sé, no hay un análisis sistemático sobre el impacto", ha dicho Davis en una comisión parlamentaria, defendiendo que sería más apropiado llevar a cabo ese análisis en una fase más avanzada del proceso de negociación.
Esta afirmación de Davies no pasó desapercibida, obviamente, a los diputados de la oposición, muchos de los cuales han sostenido que Davis se estaba contradiciendo con una afirmación previa en la que aseguró que el Gobierno tenía un análisis sobre los impactos sectoriales con un nivel de detalle "minucioso".
En cualquier caso, no cabe duda de que los comentarios del ministro del Brexit van a servir para hacer más notable las críticas al Gobierno de Theresa May por su forma de negociar el Brexit. Estas pasan por un momento delicado por la manera de abordar el tema de la frontera irlandesa, que ha sido puesta de ejemplo por el ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, al hablar de la situación de La Verja.
Desde la oficina de May, en cambio, se afirma que la primera ministra está trabajando para desbloquear las negociaciones sobre el Brexit y que ya se han hecho progresos de cara a la cumbre europea de la próxima semana.
