
Cuando se escriba la historia del Carnaval en la comarca, Miguel Ángel Jiménez Aragón tendrá un lugar destacado. Se lo ha ganado desde que prendiera en él una pasión que le viene desde muy joven, cuando vio en la Cabalgata del Humor de San Roque a personajes populares del disfraz como Palmero y Bachito, o a las primeras agrupaciones actuar en la Plaza de Armas. Comenzó a participar en concursos de disfraces, junto a Isabel, la que hoy es su esposa, pero sería su habilidad para escribir la que le situaría como un reconocido letrista.
En su dilatada carrera como autor, “juntaletras” -como a él le gusta referirse-, ha estado en un total de 86 finales y conseguido 36 primeros premios. Ello le sitúa como el más laureado de la historia de los carnavales campogibraltareños. Asimismo ha sido distinguido con el León del Carnaval, ha sido pregonero de Castellar y de San Roque, y se hizo con los siempre difíciles premios al mejor pasodoble en Algeciras, La Línea y San Roque. Con especial orgullo lleva el haber sido distinguido con la Mención de Honor del municipio, no sólo por su faceta como autor de carnaval, sino también por su oficio: la orfebrería, donde ha colaborado con cofradías, hermandades y asociaciones del municipio desde hace muchos años. Su generosidad le ha llevado a colaborar desinteresadamente con este tipo de colectivos, donando trabajos artesanos y artísticos, restaurando piezas de arte y apoyando a cofradías con pocos recursos.
Como carnavalero empezó en la década de los noventa escribiendo para algún que otro grupo como “Los Cacos”, pero al poco formó su chirigota, con música de Manolo Sueiro. “El patinazo”, “Los verdaderos Buscavidas”, “Marisma y arenas”, pertenecen a ese período con el referido músico. Por su parte, “Los aviadores” contaría con la música de David Victoria, al que siempre ha considerado uno de sus maestros.
Tras tomarse un año de descanso con su chirigota, sorprendió a los aficionados con su primera comparsa. “Un minuto y a escena”, una agrupación femenina de La Línea.
Con el favor del público y de los entendidos continuó en la chirigota, colaborando con distintas agrupaciones, pero no tardaría en escribir su propia comparsa, “La Voluntad”, con música de Roberto Arenillas y dirección de Antonio Navas, etapa de la que guarda un especial recuerdo.
Luego vinieron “La Casa de la Alegría”, “El confidente” y “La rebelión”. Tras esta última quiso descansar de los concursos, para así centrarse en un carnaval más sencillo y de la calle, e intentó potenciar con ello el carnaval callejero en San Roque, sacando dos agrupaciones localistas, con repertorio íntegro para su pueblo y su gente.
Dos años más tardes y gracias al empeño de su hija mayor, Alba, volvió a sacar una comparsa, “La callescuela”. En ella mezcla veteranía y savia nueva. Comparsa con la que continuaría en los carnavales siguientes llamándose “Los creativos”.
Pero su labor como letrista va más allá del Campo de Gibraltar, -de donde se halla en este momento apartado-, y desde hace cuatro años escribe para una chirigota de Los Palacios, en Sevilla, donde incorpora la música de su inseparable Antonio Navas. Ambos creadores sanroqueños colaboraran con una chirigota de Almadén, en Ciudad Real, donde es apreciado y ha conseguido excelentes resultados el arte de estos dos sanroqueños.
A Jiménez Aragón se debe también el himno del Club Deportivo San Roque.
Con todo, Miguel Ángel Jiménez destaca que lo más importante no son los premios, sino “las amistades que he fraguado, algunas considerada auténtica familia. Todo lo que me ha aportado esa relación que me ha servido para ser mejor persona”.